POLITICA
Solicitaron destitución de Temer, a dÃas del juicio ante el Tribunal Electoral
Fecha: 30/03/2017 12:37
- Brasil podrÃa perder a su segundo presidente en menos de un año por supuesta corrupción en la campaña que llevó al poder a la destituida Dilma Rousseff y al actual mandatario, Michel Temer, a la vicepresidencia
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El martes próximo se iniciará el juicio para anular la victoria de la fórmula Dilma Rousseff-Michel Temer en las presidenciales del 2014. Es un nuevo capÃtulo de la historia que comenzó con la salida de la ex presidenta y la entrada, en el Palacio del Planalto de su ex vice Michel Temer, y puede terminar con la destitución del actual jefe de Estado. El juez Herman Benjamin, del Tribunal Superior Electoral (TSE), parece decidido a pedir la revocación del mandato de ambos, por acusar a la organización de la campaña de hace dos años de "recibir" unos 25 millones de dólares de manos de Odebrecht, a cambio de una medida que habrÃa beneficiado a esta empresas.
Si como prevé Benjamin el TSE procediera a la casación de la fórmula, se crearÃa una crisis polÃtica de proporciones desmesuradas. Es que el presidente Temer tendrÃa que abandonar, inmediatamente, el cargo. En esa instancia, el Congreso deberÃa realizar una elección indirecta de un mandatario que permanezca en la función hasta las elecciones de octubre de 2018. Si en ese caso declararan "inelegible" a Dilma, pero no a Temer, este último podrÃa volver a ocupar la presidencia de Brasil si el Parlamento lo reelige. Hay algo aun menos prolijo: que se condene solo a Rousseff por el delito de uso de recursos ilegÃtimos en la financiación de la campaña electoral, pero se exima a Temer de toda culpa en esa infracción.
Desde ayer están en primera fila del escenario las especulaciones sobre lo que puede ocurrir a partir del martes, cuando el alto tribunal comience las deliberaciones. Estas deben terminar en un total cuatro sesiones; pero hay quienes proponen prolongar el caso "al infinito", de modo que recién se juzgue en 2018. En el caso del juez Gilmar Mendes, quien además de pertenecer a la Corte Suprema es titular del tribunal electoral, el magistrado piensa que "no hay como prever cuándo podrá finalizar el juzgamiento para la casación". En su visión "habrá mucha discusión sobre las pruebas por lo que es imposible saber cuando la corte terminará de analizar el caso".
En el Palacio del Planalto contemplan con alguna aprensión si la actual composición del TSE acompañará o no en cantidad de votos (son siete en total) a la preferencia del juez Benjamin por la anulación lisa y llana de los resultados de 2014. Los números por ahora dan que sÃ. Pero si esto llegara a ocurrir, no todo estarÃa perdido para el actual gobierno. Los abogados de Temer entrarÃan con recursos en la Corte Electoral como también en la Corte Suprema (STF) de modo de empujar para 2018, el año de la nueva elección presidencial, cualquier decisión.
Hay un dato muy curioso en este proceso. Quien demandó la cancelación del resultado electoral del 27 de octubre de 2014 fue el Partido Socialdemócrata de Brasil (PSDB). En aquel momento su candidato derrotado Aécio Neves, actualmente senador, pretendÃa que la demanda fuera resuelta rápidamente. Hoy, sin embargo, tiene una postura bastante diferente. En un comunicado emitido el lunes último, el PSDB culpó a Dilma pero dijo que Temer no tenÃa nada que ver con las "irregularidades" de financiación de esa campaña.
El magistrado Benjamin realizó un trabajo titánico. En un mes tomó 52 declaraciones con el objetivo de determinar si habÃa o no "abuso de poder polÃtico y económico" en el proceso de la campaña electoral, que habrÃa utilizado recursos espurios (las coimas salidas de las arcas de Petrobras por la vÃa de Odebrecht). Justamente, entre quienes dieron testimonio se contaban los ex ejecutivos de la constructora. Además de cuestionar el origen de los 25 millones de dólares volcadas a la campaña Dilma-Temer, la Corte electoral acusa a la fórmula de haber instado a la empresa a pagar actividades de campaña electoral de sus partidos aliados; al tiempo que la empresa de los Odebrecht abonaba, también, a Joao Santana, el especialista en marketing polÃtico que se encargó de toda la propaganda.
Los abogados de la defensa tanto de Rousseff como de Temer argumentan que no hubo gastos por encima de aquellas cosas comprobadas legalmente. Y subrayan que el financiamiento fue legal y que ninguno de los dos candidatos tenÃa como saber si el dinero procedÃa de fuentes ilegales. (APFMercosur)
Fuente:
Brasilia, 30 mar (APFMercosur)